ausencia o bajo deseo sexual

Disminución (o ausencia) de fantasías y deseos de actividad sexual de forma persistente o recurrente.

No suelen tomar la iniciativa sexual y cuando lo hacen, las inician con desgana, aunque en algunos casos después experimenten satisfacción sexual.

Suelen causar un malestar significativo a la persona que lo padece y un deterioro de las relaciones de pareja.

El juicio de deficiencia o ausencia debe ser efectuado por el clínico, teniendo en cuenta factores que, como la edad, el sexo y el contexto de la vida del individuo, afectan a la actividad sexual.

Posibles causas

Las personas que han sufrido siempre este problema expresan que podrían vivir toda la vida sin sexo y que para ellos es una obligación. El problema surge cuando están en pareja. En ocasiones, este problema enmascara otro tipo de problemas sexuales.

En otras ocasiones, el problema surge debido a las diferencias en el ajuste sexual de la pareja y en una mala negociación y acuerdo, lo que conlleva conflicto, resentimientos y distanciamiento emocional.

También es importante los acontecimientos externos que pueden estar afectando a la persona como estresores, como ahora, el embarazo, nacimiento de un hijo o problemas económicos, familiares o laborales. Así como problemas de ansiedad o depresión.